Hemos recorrido junto a María y José un camino de amor, compromiso y obediencia; hoy al llegar a nuestro último día de Novena, la felicidad nos embarga por acoger en nuestros corazones al niño Jesús, quien al nacer en el pesebre nos enseña que lo más importante es la sencillez, la humildad y el servicio a los demás.
El nacimiento de nuestro Salvador Jesucristo, está lleno de magia, porque es el renacimiento de la reconciliación, el reencuentro y la unión fraternal. Recuerda que la navidad eres tú cuando iluminas con tu vida el camino de los demás con bondad, paciencia, alegría y generosidad.
“La navidad suele ser una fiesta ruidosa:
nos vendría bien un poco de silencio,
para oír la voz del amor”
Papa Francisco.
Docentes de Preescolar y Primero